La alopecia es la pérdida anormal de cabello o de pelo en alguna otra parte del cuerpo. La causa más frecuente de consulta dermatológica por alopecia es la “androgenética” o calvicie común, que afecta fundamentalmente a varones, aunque también afecta en menor medida a mujeres.
Las alopecias se clasifican en dos grandes grupos: reversibles y cicatriciales.
Entre las alopecias reversibles nos encontramos como las más frecuentes la alopecia androgenética (Masculina o femenina), la alopecia areata o pelada, el efluvio telógeno, la alopecia cíclica femenina, la alopecia post-parto, alopecias de causa externa causadas por medicamentos y el síndrome de SAHA fundamentalmente.
Dentro de las alopecias cicatriciales, causadas por patologías que producen la destrucción definitiva del folículo piloso, podemos ver la pseudopelada de Brocq, la alopecia groenlándica, el lupus eritematoso discoide, la foliculitis decalvante, la alopecia fibrosante frontal, el secundarismo sifilítico, la esclerodermia localizada y algunas tiñas decalvantes como el Querión de Celso.
Cada una de estas patologías requiere de un correcto diagnóstico dermatológico para poder instaurar el tratamiento adecuado. No existe ningún tratamiento ni secreto ni generalizado para todas las alopecias: el tratamiento debe ser personalizado y correcto a cada caso.
La farmacología actual nos ayuda a dar soluciones eficaces a la mayoría de nuestros pacientes. Desde el Finasteride oral para la alopecia androgenética, fundamentalmente la masculina, o los antiandrógenos para la alopecia endocrinológica femenina (terapia secuencial invertida, tratamiento hormonal del síndrome SAHA, hiperprolactinemia, alopecia ovárica o suprarrenal,etc…).
Los suplementos orales de cistina y aminoácidos azufrados, la infiltración con mesoterapia de DUTASTERIDE, inmunomoduladores bloqueadores de radicales libres, suplementos polivitamínicos y de aminoácidos infiltrados, así como tratamientos ambulatorios: Minoxidil en la forma tradicional en alcohol y propilenglicol, o en espuma o los tan bien tolerados liposomas de minoxidil, los inhibidores de la prostaglandina D2 o el “Latanoprost”, tan eficaz en el tratamiento de la alopecia o redensificación de cejas y pestañas.
El correcto diagnóstico y la instauración precoz de tratamiento en la alopecia, sea del tipo que sea, nos permite mejorar la autoestima a gran número de pacientes con alopecia, sin necesidad de recurrir a técnicas invasivas.
Una vez más la formulación magistral es la gran aliada a la hora de instaurar un tratamiento absolutamente personalizado y por lo tanto más eficaz y, por qué no decirlo, también más asequible y menos comercial, como debe perseguir la auténtica y ética medicina.